Que entretenido es esto, que nuestra profesora nos ponga a prueba o mejor dicho ponga a prueba los conocimientos que deberíamos manejar a estas alturas de nuestra carrera (Pedagogía en Educación Matemática), me explico, los días 12 y 13 del mes en curso, fuimos evaluados mediante un taller en la asignatura de Didáctica de la Estadística, en el cual se nos preguntaros diversos temas relacionados con estadística y probabilidad, digo entretenido por la sencilla razón de que en un poco tiempo más esos mismos contenidos que se nos estaba preguntando en el taller nosotros vamos a tener que enseñarlos o más bien intentar enseñarlos de la forma más didáctica posible para que todos nuestros estudiantes lo asimilen de una buena manera.
Es por esto que encuentro sumamente interesantes y una ayuda constante este tipo de evaluaciones (talleres), puesto que uno al resolverlo se pone tanto en el lugar de docente como en el de estudiante y sirve para darse cuenta de los muchos errores que pueden llegar a cometer los profesores en la creación de los instrumentos de evaluación, por ejemplo, el mal planteamiento de un ejercicio, ya sea en la redacción que emplea o en la utilización de un vocabulario poco adecuado lo que conlleva a que el estudiante no sepa en forma clara lo que se le esta preguntando y por supuesto no va a saber qué responder y se equivocará, otro factor importante es que no se esté tomando en cuenta el nivel en el que se encuentra el alumno, con esto me refiero a que los docentes no siempre están al tanto de los conocimientos previos que poseen sus estudiantes y se le preguntan cosas fuera de contexto, por otra parte, está lo relacionado con que el profesor no debe entregar sólo una guía con ejercicios para resolver y todo el rato de la misma forma, ya que con esto nunca se creara pensamiento critico en sus estudiantes, ni tampoco capacidad de análisis, sólo se formara a un reproductor de ejercicios y que es tal cual como se han formando las generaciones anteriores, esto es importante tomarlo como referencia para nuestro futuro desempeño docente y lograr un pequeño cambio en la forma de enseñar los contenidos y también evaluarlos de la forma más coherente posible.
A mi parecer, con este tipo de actividades se contribuye mucho a la retroinspección de cada uno de nosotros para saber cuales son los puntos débiles en nuestra formación y da pie para poder retroalimentarse, porque pienso que salir al mundo laboral con mínimas falencias puede llegar a transformarse en una pesadilla, creo que nuestras primeras vallas a superar son nuestras prácticas (Pedagógica y Profesional) para así ir formando el camino en el cual nos vamos a desenvolver durante gran parte de nuestras vidas.
En conclusión, los talleres son realmente un aporte y que se van complementando cada semana con los diferentes documentos que tenemos que leer para poder lograr de la forma más provechosa posible crear en nuestras mentes la idea de que vamos a salir al mundo a trabajar con mucha gente y que es distinta a nosotros y por sobre todo aprende cada uno de una manera diferente y ahí se centra nuestra labor, la de enseñar de la manera más didáctica posible para que todos los integrantes del aula aprendan.
Es por esto que encuentro sumamente interesantes y una ayuda constante este tipo de evaluaciones (talleres), puesto que uno al resolverlo se pone tanto en el lugar de docente como en el de estudiante y sirve para darse cuenta de los muchos errores que pueden llegar a cometer los profesores en la creación de los instrumentos de evaluación, por ejemplo, el mal planteamiento de un ejercicio, ya sea en la redacción que emplea o en la utilización de un vocabulario poco adecuado lo que conlleva a que el estudiante no sepa en forma clara lo que se le esta preguntando y por supuesto no va a saber qué responder y se equivocará, otro factor importante es que no se esté tomando en cuenta el nivel en el que se encuentra el alumno, con esto me refiero a que los docentes no siempre están al tanto de los conocimientos previos que poseen sus estudiantes y se le preguntan cosas fuera de contexto, por otra parte, está lo relacionado con que el profesor no debe entregar sólo una guía con ejercicios para resolver y todo el rato de la misma forma, ya que con esto nunca se creara pensamiento critico en sus estudiantes, ni tampoco capacidad de análisis, sólo se formara a un reproductor de ejercicios y que es tal cual como se han formando las generaciones anteriores, esto es importante tomarlo como referencia para nuestro futuro desempeño docente y lograr un pequeño cambio en la forma de enseñar los contenidos y también evaluarlos de la forma más coherente posible.
A mi parecer, con este tipo de actividades se contribuye mucho a la retroinspección de cada uno de nosotros para saber cuales son los puntos débiles en nuestra formación y da pie para poder retroalimentarse, porque pienso que salir al mundo laboral con mínimas falencias puede llegar a transformarse en una pesadilla, creo que nuestras primeras vallas a superar son nuestras prácticas (Pedagógica y Profesional) para así ir formando el camino en el cual nos vamos a desenvolver durante gran parte de nuestras vidas.
En conclusión, los talleres son realmente un aporte y que se van complementando cada semana con los diferentes documentos que tenemos que leer para poder lograr de la forma más provechosa posible crear en nuestras mentes la idea de que vamos a salir al mundo a trabajar con mucha gente y que es distinta a nosotros y por sobre todo aprende cada uno de una manera diferente y ahí se centra nuestra labor, la de enseñar de la manera más didáctica posible para que todos los integrantes del aula aprendan.
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